Necesitaremos:
- 200 gr de harina de fuerza de panadería
- 200 gr de harina integral de trigo
- Un cubito de levadura fresca
- 200 ml de agua
- Cucharada de aceite de oliva
- Cucharadita de sal
- Semillas y frutos secos
En un bol mezclamos las dos harinas y reservamos. Por otro lado entibiamos el agua y deshacemos el cubo de levadura en ella con los dedos. Vertemos el agua sobre la harina y mezclamos ligeramente.
A continuación añadimos el aceite y la sal y amasamos hasta amalgamar la masa. Esta receta está muy bien medida, así que no he usado ni un gramo más de harina, si os parece que queda muy seca, es por la harina integral, con embadurnar las manos en aceite para amasar será suficiente.
Finalmente incorporamos la mezcla que hayamos elegido de semillas y frutos secos, yo la he hecho con semillas de sésamo y lino, pipas de calabaza y girasol y nueces. Es hora de amasar un ratito para que nuestro pan vaya cogiendo forma.
Finalmente incorporamos la mezcla que hayamos elegido de semillas y frutos secos, yo la he hecho con semillas de sésamo y lino, pipas de calabaza y girasol y nueces. Es hora de amasar un ratito para que nuestro pan vaya cogiendo forma.
Boleamos un poco y colocamos la bola conseguida en el bol engrasado en aceite y tapado con papel film. Dejamos que doble su volumen, para lo que necesitará una hora en un lugar cálido y fuera de ráfagas de aire.
Pasado este tiempo sacaremos el aire amasando un poquito y daremos la forma deseada al pan, yo he preferido hacerlo tipo pan de molde, así que lo he colocado sobre un molde de silicona con la forma propia, engrasado ligeramente en aceite, y extendiendo la masa para que se asiente.
Dejamos que crezca durante 30 ó 40 minutos y ponemos a precalentar el horno a 200 grados calor arriba y abajo.
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