La receta de hoy se complica un poco, hay que ir avanzando en cuanto a la elaboracion de repostería para conseguir resultados, así que os traigo la receta del pan de leche casero más rico que os podáis imaginar.
Se necesita tener unas horas a nuestra disposición para hacer esta receta, pero merece la pena, os lo aseguro.
- 450 gr. de Harina
- 250 ml. de Leche
- 1 Huevo
- 50 gr. de Azúcar
- Un cubo de Levadura fresca
- 50 gr. de Mantequilla
- Una pizca de sal
Lo primero que tenemos que hacer es templar la leche en el microondas y deshacer el cubito de levadura fresca con los dedos para que se disuelva fácilmente en la leche. A continuación echaremos el azúcar, el huevo entero y la mantequilla en trozos pequeños.
Por otra parte habrá que mezclar la harina con la pizca de sal y lo mezclaremos bien para añadirlo al bol que tenemos preparado y amasar con paciencia hasta conseguir una masa lisa, homogénea y no pegajosa.
Ahora dejaremos la masa en un bol y la taparemos con un trapo limpio para que crezca y doble su tamaño. Para esto necesitará una hora más o menos, en un ambiente cálido y seco.
Cuando alcance el tamaño deseado, vamos a amasar de nuevo unos minutos y a continuación tendremos que dividir la masa en trozos más o menos iguales de unos 100 gr. para formar los bollos de pan de leche. Necesitará de nuevo un mínimo de 30 minutos para que doblen su tamaño, yo los he dejado una hora.
Después de dejarlos crecer lo suficiente haremos unos cortes en diagonal en la superficie de los bollos y los meteremos al horno a 200 grados con calor arriba y abajo, hasta que los veáis doraditos, aproximadamente 20 minutos.
Cuando estén listos los dejaremos enfriar sobre una rejilla para que no se ablanden.
Sólo tenéis que esperar a que se enfrién y ya podréis disfrutar de unos bollos de pan de leche caseros, sanos, blanditos y deliciosos.
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